Como ya analizamos en un artículo anterior, cuando adquirimos productos sanitarios hay que prestar especial atención a determinadas cuestiones si queremos tener siempre las máximas garantías. Tras nuestra guía para comprar productos de ortodoncia online de forma segura, hemos elaborado un listado con los puntos más importantes en los que fijarnos específicamente al comprar brackets metálicos.
1. Calidad del producto
Que los materiales sean de calidad, fabricados con la última tecnología y de proveedores de confianza es el punto más importante a la hora de comprar productos de ortodoncia en general. En los brackets metálicos debemos siempre fijarnos en que el material utilizado en la fabricación sea el acero inoxidable 17:4 Ph. ¿Por qué? Porque es un acero templado conocido por su resistencia a la corrosión y sus altos niveles de resistencia y dureza, especialmente en tratamientos térmicos.
2. Fabricación de última tecnología
Si queremos comprar brackets metálicos de calidad debemos fijarnos en que estén fabricados con la tecnología MIM (metal injection moulding). Esta tecnología permite la fabricación de piezas de reducido tamaño, pero de alta precisión, sobre el modelo original y sin necesidad de mecanizado posterior, con gran abaratamiento de costes. Además, el proceso MIM es altamente ecológico y respetuoso con el medio ambiente, no genera residuos, y no produce emisiones al exterior.
Los brackets metálicos pueden estar fabricados en dos piezas (como por ejemplo el Micro Classic) o en una sola (como el Precision). Tradicionalmente se pensaba que los que están fabricados en dos piezas son un poco menos robustos que los de una pieza, pero esto ya no es así. Lo verdaderamente importante es que las dos piezas estén unidas con soldadura láser y sin fundentes. Si esto es así, el bracket, aunque sea de dos piezas, será igual de sólido y estable que uno de una sola pieza.
3. Diseño
El diseño es también uno de los factores principales a lo hora de comprar brackets metálicos, tanto para el clínico como para el paciente.
Como ortodoncista, fíjate en estas características en el diseño de los brackets metálicos:
– Que las alas del bracket sean de bajo perfil reduce las interferencias oclusales y permite una correcta utilización de elásticos con espacio suficiente para las ligaduras.
– Que tenga una guía en el centro del bracket para su fácil colocación.
– Que la base sea de malla calibre 80 MESH, con tratamiento de arenado superficial que permita una excelente adhesión mecánica.
– Que tenga torque en la base, para una mayor confiabilidad en los movimientos de Tip y Torque.
En cuanto al paciente, es fundamental que sea de forma romboidal con esquinas biseladas, características que aumentan la comodidad y evitan muchas molestias al paciente.
4. Pago seguro
Si vas a comprar brackets metálicos desde alguna plataforma online, es imprescindible que compruebes que la página web donde tengas que introducir los datos bancarios sea segura. Para identificar una página web segura tienes que comprobar que su dirección electrónica pasa de ser http:// a https:// (indicativo de servidor seguro). Además, en la parte inferior derecha o izquierda del navegador tiene que aparecer un candado cerrado. Si haces doble clic sobre el candado o la llave, aparecerá información sobre el certificado de seguridad del sitio.
Además, cuantas más formas de pago ofrezcan para elegir, mucho mejor. Desconfía de las que solo ofrezcan uno, puesto que por lo general son menos fiables. Las formas de pago más habituales son:
– Domiciliación bancaria
– Transferencia bancaria
– Tarjeta de crédito
– Paypal
5. Política de devoluciones
Las tiendas están obligadas a ofrecer un plazo de devolución de 14 días. Aunque éste es el plazo legal, cuanto mayor sea el plazo de devolución, más seguros, y sobre todo cómodos, nos sentiremos. En Bracket 360, por ejemplo, ofrecemos 30 días para que el cliente pueda devolver o cambiar el material adquirido.