Las bandas de ortodoncia y los tubos molares cumplen una función muy similar en un tratamiento de ortodoncia, ya que son los aditamentos que se ubican en el primer o segundo molar que tenemos en boca (6 ó 7) para conseguir una perfecta oclusión de dientes, musculatura y articulación.
Sin embargo, aunque los dos sirven para lo mismo, trabajan de distinta forma. Vamos a ver en este artículo las diferencias principales entre ellos y cuándo es más conveniente utilizar bandas y cuándo es mejor utilizar tubos.
Bandas y tubos: una definición
Bandas de ortodoncia
Son anillos metálicos que rodean toda la pieza dental, donde suele ir soldado un tubo para que pase el arco y diversos aditamentos. Las bandas de ortodoncia se cementan al diente con un tipo específico de adhesivo y están totalmente adaptadas a la forma del molar. Se adaptan a las formas distintas de cada cuadrante y al tamaño del molar que varía sensiblemente entre pacientes, como por ejemplo de un paciente adulto a un niño. Su confección es en acero inoxidable que resiste a la deformación de las fuerzas masticatorias a la vez que resiste a la corrosión. Para la colocación de bandas y su posterior descementado, se utiliza instrumental específico como el mordedor para bandas o la pinza Oliver, para su retirada.
Las bandas pueden componerse simplemente del anillo, que se utiliza para soldar aparatología auxiliar como Quad Helix, disyuntores o barras palatinas, o pueden llevar soldados tubos simples, dobles o triples en la cara vestibular. Los tubos triples normalmente se dan en bandas para la arcada superior para evitar incomodidad al paciente, debido a su tamaño. En la cara lingual, las bandas pueden tener soldados otros accesorios, como por ejemplo un cajetín, un gancho o palometa y otros auxiliares dependiendo de las necesidades del tratamiento.
Tubos molares
Los tubos son unos dispositivos metálicos que se adhieren de forma directa sobre el esmalte en las caras vestibulares de los molares (aunque también pueden soldarse en las bandas). Sirven para soportar alambres activos y pasivos. El tubo tiene al menos un orificio por el cual se inserta el alambre, enhebrándolo a través del mismo. Así, se diferencia del Bracket, que tiene una ranura y el alambre se inserta de manera sencilla sin tener que enhebrarlo para ligarlo luego mediante una ligadura o mediante el sistema de autoligado o autocierre. Los alicates más utilizados cuando trabajamos sobre tubos son los de corte y doblado distal, cuya punta angulada permite llegar de forma precisa a las zonas más difíciles de la boca del paciente, y realizar cortes precisos sin alambre sobrante que pueda dañar los tejidos. Si queréis saber más sobre instrumental de ortodoncia, no os perdáis este extenso artículo en el que repasamos los distintos tipos de alicates que se utilizan en un tratamiento de ortodoncia.
Los tubos se pueden clasificar:
- Según la aleación utilizada:
– Acero inoxidable
– Titanio
– Exentos de níquel
- Según el sistema y slot
– ROTH .022
– ROTH .018
– MBT .022
- Según sea convertible o no
En el caso de los tubos del primer molar, estos pueden ser convertibles o no convertibles, es decir, el clínico puede retirar una tapa para que el slot funcione como el de un bracket. Por su parte, los tubos del segundo molar son siempre no convertibles y de un tamaño algo más reducido.
- Además, el tubo en sí puede ser individual o sencillo, doble o triple (según el número de agujeros que tenga).
Casos en los que se utilizan las bandas de ortodoncia
- Cuando se van a usar aparatos adicionales a los Brackets como aparatos intraorales (barras transpalatinas por ejemplo), aparatos de hábitos de lengua como rejillas, un botón de Nance, arcos linguales…
- Cuando al paciente se le ha caído varias veces el tubo ya que la banda casi no se puede despegar porque se agarra a toda la superficie del diente.
- Cuando se van a hacer movimientos muy fuertes con aparatos extraorales o cuando queremos enderezar un diente por ejemplo desde un implante.
- Cuando se hacen movimientos bruscos con mecánicas con micro tornillos en los que las superficies son metálicas y no se puede cementar un tubo.
Casos en los que se utilizan tubos molares
- En un tratamiento normal con adulto sano, colaborador y que se compromete a seguir las recomendaciones diariamente.
- Cuando el paciente tiene antecedentes de enfermedad periodontal porque el tubo es más fácil de limpiar y desarrolla menos placa.
- Cuando el paciente desarrolla mucha placa.
Ventajas y desventajas de las bandas y de los tubos
Ventajas de las bandas | Ventajas de los tubos |
Nos permiten utilizar fuerzas más intensas | Son bastante higiénicos y la limpieza es más sencilla |
Se pueden adherir prácticamente a cualquier superficie y no se despegan fácilmente | Al retirarlos no hay espacios residuales ya que no requiere de gomas separadoras |
Se pueden soldar diferentes aditamentos y hacer modificaciones para adaptarlo al caso del paciente, como por ejemplo soldar algunas barras para permitir la tracción de caninos | Más fáciles de colocar y de reposicionar. La cementación se puede hacer el mismo día que se hace la de los brackets |
Desventajas de las bandas | Desventajas de los tubos |
El paciente requiere dos citas para la colocación. En la primera se coloca un separador para separar las dos muelas y en la segunda se cementa la banda | Requieren que el paciente sea más cuidadoso para que no se despeguen |
Es más fácil que se acumule placa y la limpieza debe ser más concienzuda | No se pueden adherir a todas las superficies |
Cuando se retiran se quedan unos pequeños espacios entre los molares |
El cementado en bandas y tubos
Para el cementado directo de los tubos, la forma de proceder es equivalente a la de los Brackets y con el mismo adhesivo, como el Light Bond o el Transbond XT. Sin embargo, como hemos comprobado, el cementado de las bandas es un poco más complicado que el de los tubos. Para minimizar los contratiempos inesperados existen en el mercado adhesivos especiales para cementar bandas y levantes, como por ejemplo el Ultraband de Reliance, que se comercializa además de en transparente en azul, para retirar el exceso más fácilmente.
Os dejamos aquí un caso práctico de cementado de bandas de ortodoncia:
De cualquier modo siempre seréis vosotros, los profesionales, los que elegiréis en cada caso, el aditamento más indicado según vuestro diagnóstico y plan de tratamiento.